1. El tamaño de la habitación. Cuando escojas un ventilador deberás tener en cuenta el tamaño de la estancia en la que lo quieres instalar, de tal manera que, cuanto más grande sea la habitación, mayor deberán ser las aspas y la potencia del ventilador.
2. El modelo de ventilador. Hoy en día podemos encontrar un sinfín de tipos de ventiladores de techo diferentes: con luz, sin luz, con mando a distancia, con temporizador, fabricados en diferentes materiales…
3. El lugar de colocación del ventilador. La ubicación idónea de un ventilador de techo es igual de importante que los dos puntos anteriores, ya que garantizará su seguridad, buen funcionamiento y un flujo adecuado del aire. Los ventiladores deben colocarse a unos dos metros y medio de altura y las aspas deben estar a 25 centímetros del techo.
4. El tipo de techo. Finalmente, hay que saber en qué tipo de techo se va a colocar el ventilador. Cada techo necesitará un tipo de taco diferente para fijar el ventilador con total seguridad.